martes, 2 de febrero de 2016

471. Pedro y el día de la marmota

Por fin ha dado un paso al frente Pedro Sánchez, hoy 2 de febrero, en su camino no se sabe a dónde. A mí me cuesta creer que llegue a algún puerto, porque necesita poner de acuerdo a Rivera e Iglesias, algo que a priori parece imposible y que tampoco le vale de mucho. Pero cosas más raras se han visto. Por ejemplo, la espantá del unurabla Mas. Este maestro de malabaristas, se presentó en el número cuatro de su lista y así como medio de perfil detrás de la calva de Romeva a ver si los votantes no lo descubrían. Cuando vio que el truco no le funcionaba, aguantó el envite lo que pudo, pero al final tuvo que recurrir a un sujeto que pasaba por allí, también camuflado, aunque éste con melena de beatle, para no tener que repetir las elecciones. Unas elecciones que, seguramente, habrían marcado el otro lado del pico del independentismo, por lo que, si querían salvar el prusés, no les quedaba otra que recurrir al sacrificio de dama. Después de semejante alarde de funambulismo, nos podemos esperar cualquier cosa.

De todas formas, menos mal que por fin se mueve algo, porque esto del impasse postelectoral se estaba volviendo más insoportable que un dolor de huevos, con perdón de la expresión. Rajoy está a punto de batir varias marcas. No sólo será el primer presidente que no revalida su mandato, sino que con su pasotismo ha conseguido poner nervioso al rey, algo que tiene verdadero mérito. Nos lo podemos imaginar anoche murmurando entre dientes y mañana el coñazo de la audiencia real. Tanto ha mareado la perdiz, que el bueno del rey ha llamado a Sánchez y le ha dicho: anda, porfa, Pedro, jo, da un pasito adelante, aunque sea a ninguna parte, cualquier cosa con tal de librarnos del plasta este de la barba, es que no lo soporto. Rajoy ha llevado a este país a bajar diez puestos en el índice de percepción de la corrupción que elabora la organización Transparencia Internacional, algo sólo igualado por Gambia, Libia y Guinea-Bissau. Y ha situado al país en el segundo puesto de Europa en tasa de pobreza, sólo superado por Letonia.

Su obsesión por el inmovilismo le ha llevado a la situación actual. Esa norma que lleva a rajatabla (mantener la cara de cartón) sólo le ha sido de utilidad en una ocasión: cuando apareció un bigardo de dos metros y le arreó una hostia en plena calle de su Pontevedra natal. Su respuesta a la agresión fue debidamente valorada en este blog, Post# 457, escrito en la jornada de reflexión. A este incidente le habría podido sacar mucha punta y rédito electoral, si el agresor hubiera sido de Podemos y con rastas, pero tuvo la mala suerte de que el tipo resultó ser un familiar de su señora, por lo que hubo que tapar el asunto bajo un manto de silencio. Un manto del que lo han rescatado, como no podía ser menos, las chirigotas del Carnaval de Cádiz. Ya saben que los gaditanos no dejan de chotearse de todo lo sucedido en el año. Hay incluso una chirigota sobre el prusés, que se llama La pela es la pela. Pero, la verdad es que tiene bastante poca gracia. La que es buena es la de la hostia de Rajoy que pueden ver AQUÍ.

Así que, como Rajoy seguía parado como siempre, Pedro ha dado el paso al frente. Ha elegido para hacerlo el 2 de febrero, el Día de la Marmota. Supongo que ya conocen la tradición. En muchos pueblos de USA y Canadá, ese día hacen una fiesta en cuyo momento cumbre sacan a una pobre marmota de su hibernación y la ponen sobre una superficie plana para comprobar si ve su propia sombra. Hoy, la marmota más famosa, la del pueblo de Punxsutawney (Pensilvania), no vio sombra alguna, lo que quiere decir que ya se acaba el invierno y viene la primavera. Será en Estados Unidos. Aquí en España, a finales de septiembre, empezó el veranillo de San Miguel y hasta ahora. Llevamos más de cuatro meses de veranillo. Por si quedaba algún negacionista del cambio climático. Yo ni siquiera he sacado el abrigo de mi armario. Cada mañana, antes de salir de casa, consulto el tiempo en mi móvil superinteligente. Toco sobre un icono que representa a un micrófono y le digo a gritos: QUÉ TIEMPO HACE EN MADRID. Inmediatamente, una voz femenina, cantarina y juguetona me informa: En Madrid hay seis grados con tiempo despejado… Con una chaquetita de punto y un pañuelo al cuello para el relente, estoy listo para caminar hasta el Metro.

No deja de resultar simbólico esto del Día de la Marmota. A lo mejor los del PSOE han recurrido al mismo sistema de predicción. Han sacado de su hibernación a Alfonso Guerra y lo han puesto en la acera enfrente de Ferraz. Pero aquí, con la solana que hay, no cabe duda de que habrá visto perfectamente su sombra. Eso quiere decir que el invierno postelectoral no se ha terminado todavía, que nos quedan semanas de seguir dando vueltas al corro de la patata, Iglesias tras de Sánchez, Sanchez tras de Rivera y todos girando alrededor de un Rajoy que permanece inmutable, con su gobierno en funciones. En el propio PP están también haciendo malabares para ver cómo se lo quitan de en medio, pero le han llegado a atribuir la autoría de la conocida frase Chufla, chufla, como no te apartes tú…

Como, supongo, saben, la popularidad del pueblo ese de nombre impronunciable, viene de la película El Día de la Marmota, que aquí se rebautizó como Atrapado en el tiempo. Por cierto es una película cojonuda. El protagonista es un hombre del tiempo de la tele, al que le toca viajar al pueblo citado, para cubrir el evento para su cadena. Allí se ve atrapado en un bucle del tiempo que le hace repetir una y otra vez el mismo día. Pues eso es lo que están haciendo los políticos desde que se supieron los resultados electorales, hace más de un mes. Todos se dedican a dar vueltas proclamando sus líneas rojas, como si los sufridos espectadores no supiéramos el nulo valor que tiene la palabra de un político. Los políticos son especialistas en decir Diego donde dijeron digo, y proclamar de este agua no beberé antes de beberse la jarra entera. Así que, a ver si es verdad que se mueve algo esta vez y se acaba el sainete.

Mientras los políticos juegan a este parchís insufrible, la vida sigue, los carnavales están en marcha y el próximo día 8 se celebrará la fiesta del Año Nuevo Chino. Ese día entraremos en el Año del Mono y la comunidad china del barrio de Usera prepara grandes celebraciones. El año pasado, el inicio del Año de la Cabra coincidió con mi cumpleaños y la verdad es que no me puedo quejar de sus resultados, aunque la milagrosa permanencia del Dépor en Primera hay que atribuírsela a San Benitiño de Lérez y a las rogativas que se le elevaron desde este blog. El Dépor es este año el rey del empate. Es el equipo que lleva más empates de Europa. ¿Cómo lo consigue? Pues con un doble procedimiento. Cuando se adelanta en el marcador es incapaz de cerrar el partido. Y cuando va por detrás es cuando mejor juega. Hasta que empata. Luego, su juego se vuelve a espesar. Nosotros, en vez de partido a partido, vamos puntito a puntito.

En fin, he parado para cenar y he vuelto a ver la rueda de prensa de Sánchez. Si realmente consigue formar gobierno habrá que darle un margen de confianza. A mí, así de entrada, no me gusta demasiado, aunque eso de que tenga en contra a los barones, el Buda Feliz y la Susana, es un punto a su favor. Veremos. Una cosa que no soporto es su insistencia en dirigirse a los españoles y españolas, preocuparse por los niños y niñas y los trabajadores y trabajadoras. Mira que nos reíamos del lehendakari Ibarreche con los vascos y vascas. Pues ahora lo dicen todos. Les dejo de propina un divertido artículo al respecto de un profesor de lingüística y miembro de la Real Academia de la Lengua. Han de pinchar AQUÍ Que tengan ustedes y ustedas buenas noches y buenos nochos.


4 comentarios:

  1. No des por muerto a Rajoy. Es un hombre que maneja los tiempos con astucia, a base de no moverse. Que no se mueva no significa que no esté ojo avizor. Él cree que, si se queda quieto, los demás se estrellarán y la gente acabará por rogarle que no se vaya de la Moncloa.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo creo que le va a pasar lo contrario, que nadie le va a llamar y que tendrá que volverse a Santa Pola a seguir con lo suyo. Su paso por la presidencia será pronto un mal recuerdo. ¿Quién se acuerda ya de Gallardón y su ley del aborto? ¿De Ana Mato? ¿hasta de Wert, de luna de miel en París? El tiempo es implacable.

      Eliminar
  2. Muy acertada la comparación con el día de la marmota. Por lo que se va viendo, la cosa tiene visos de eternizarse, como en la película esa que, por cierto, a mí me resultó bastante tostón.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Bueno, para gustos cinematográficos, se pintan colores. Lo de las negociaciones se va a eternizar como usted dice. A este paso, voy a tener que eliminar la disculpa por la expresión "dolor de huevos".

      Eliminar