Mientras se dirimen los dos
grandes temas ahora mismo en candelero, que son a la vez los dilemas ontológicos clave en este punto de mi blog (el final de la temporada del Dépor y mi futuro
laboral a la vuelta del verano), yo sigo por detrás cumpliendo con determinadas
rutinas, como el chequeo médico al que me he empezado a someter, o las obras en
la terraza de mi casa que, una vez descartado el rumano sedicente que me quería
estafar, tengo ya programadas a partir de la semana que viene, bajo la tutela
de mi amigo Tito, que me está echando una mano impagable. Por eso se me ha
colado por medio el fantasma de los triglicéridos, del que les hablaré más
abajo.
Lo del Dépor en este último mes
es ciertamente asombroso, un ejemplo claro de intervención divina,
interferencia de San Benitiño de Lérez, karma, puta suerte o lo que sea. Lo que
pasa es que hasta mañana no vamos a saber si la cosa acaba con el ascenso a
Primera División (esperemos que sí) o con la
muerte al mismo borde de la orilla, lo que nos llevaría de nuevo a
entonar el ¡Válgame San Rafael! En cuanto se conozca el desenlace, les prometo
una explicación detallada y documentada de la abundante lista de hechos
prodigiosos que han llevado a las mismas puertas de la gloria a un equipo rendido,
desahuciado y desanimado hace poco más de un mes. Dirá la gente que si esto es
un juego, que si el azar (o el azahar, como he visto escrito en algún periódico
deportivo), que si la pelotita entra o no en función del Principio de Incertidumbre,
base de la Física Cuántica. Yo estoy seguro de que aquí hay intervención de una
fuerza oculta, de esas que no controlamos porque no sabemos explicar, y de la
que pronto vamos a saber si nos lleva al ascenso, o nos depara una nueva y
cruel frustración.
Además, como ya les he comentado,
el ascenso del Dépor me supondría quebrar ese punto de inflexión de la suerte
que parece amenazar mi trayectoria de surfista sobre una tabla desbocada.
Crucemos los dedos. Un vez que se conozca la suerte final del Dépor, tendré que
afrontar la segunda de las cuestiones que les he enunciado al principio: por
dónde encamino mi vida y mi trayectoria municipal. Tengo todos los números para
terminar como jubilado en unos pocos meses y parece ser lo más recomendable
dada mi edad y condición. Pero aún hay una serie de incógnitas que despejar en
la ecuación y yo estoy valorando unas cuantas variables que podrían conjurarse (cosas
más raras se han visto y San Benitiño anda por ahí rondando) aunque, como les
digo, es bastante improbable que siga en activo de aquí a unos meses.
Además, caso de haber ganado Carmena, yo tendría una actitud activa y estaría
moviendo hilos. Ahora en cambio, no pienso mover nada; si me quieren, tendrán
que venir a buscarme.
Una semana después de conocerse
la distribución, denominación y nombre del concejal responsable de las
distintas Áreas de Gobierno del Ayuntamiento, no hemos tenido grandes novedades
en la Isla de Alcatraz. Algunos indicios de por dónde van a ir los tiros, sí.
Por ejemplo, el área que toda la vida se había llamado de Urbanismo, fue renombrada
por el equipo de Carmena como Área de Desarrollo Urbano Sostenible, muy en la
línea de los objetivos de la ONU, la Agenda 2030, etc. Yo imaginaba que estos,
que, como todos, tienen que cambiar los nombres, volverían a llamarla
Urbanismo. Pues no. En las primeras versiones de los acuerdos aparecía como
Área de Desarrollo Sostenible, lo cual me parecía muy bien: si estamos en
Madrid, ya se presupone que el desarrollo del que hablamos es urbano;
recalcarlo es una redundancia. Pero miren ustedes por dónde, luego se lo han
repensado y hemos quedado finalmente como Área de Desarrollo Urbano. Lo que se
ha perdido es el adjetivo Sostenible, dando por hecho, supongo, que a partir de
ahora vamos a promover el Desarrollo Urbano Insostenible de esta ciudad de
nuestros pecados.
El nuevo concejal es de
Ciudadanos y se instaló el lunes en el despacho de la planta superior. Desde
entonces está trabajando y ha pasado a saludar brevemente por las distintas
plantas, como corresponde y como hicieron todos sus predecesores desde que yo
entre en el Ayuntamiento, con la única excepción de La Concejala Zombie, a
quien Dios y San Benitiño confundan por los siglos de los siglos, amén. A mí me
tocó el viernes y, así de primeras, me pareció un hombre simpático, llano y
juvenil. En atención a él y, al menos, durante el período de transición hasta
ver por dónde salgo, me van a permitir que vuelva a la denominación ortodoxa
del partido al que pertenece ese señor, aparcando momentáneamente el mote
chusco que le habíamos asignado en el blog y que tanto les divertía.
He hablado del aire agradable y
próximo del nuevo jefe del área en donde trabajo (no puedo referirme a otros
aspectos de su personalidad porque los desconozco) pero es que yo creo que el
físico dice mucho de las personas. Y les voy a poner algunos ejemplos, yo creo
que bastante significativos. Vean, vean.
Este señor, dos años más joven que su hermano el político socialista que llevó las Olimpiadas a Barcelona y que fue mayoritariamente aplaudido cuando reveló públicamente que le habían diagnosticado de Alzheimer, resulta que, después de una vida dedicada al PSOE, ha visto la luz como San Pablo y se ha travestido en nacionalista. A la vejez viruelas. Dado el componente genético del Alzheimer, sería muy fácil hacer un chiste al respecto, pero no es el estilo de este blog. Pero estábamos hablando de la importancia del físico y de la imagen. No cabe duda de que esta foto representa mejor que ninguna el signo político de la formación que ha acogido a este señor. Una formación que ve claro el futuro, porque está escuchando lo que dice la ciudadanía. Y con un carácter innovador, progresista, juvenil. No me dirán que exagero. Por no salirnos del sector político, vamos con otra imagen.
En este caso, el del gran tapado del prusés, además de las características compartidas con la imagen anterior (lozanía, frescura, sensación de ver claro), yo destacaría lo bien que se aprecia que este señor es catalán y no podría ser, por ejemplo extremeño o andaluz, pueblos a los que Torra considera de bestias carroñeras e incultas. Se aprecia aquí la superioridad fisiognómica del catalán, por delante de los demás pueblos ibéricos a los que los demás mortales tenemos la desgracia de pertenecer. Nos empecinamos en negar que son diferentes y, como vemos en la foto, es un empeño estéril frente a lo obvio. Voy a terminar esta serie con una foto de un señor que comparte costado ideológico con los anteriores. Esta es una imagen que excluye todo comentario, se explica por sí misma.
Este señor, dos años más joven que su hermano el político socialista que llevó las Olimpiadas a Barcelona y que fue mayoritariamente aplaudido cuando reveló públicamente que le habían diagnosticado de Alzheimer, resulta que, después de una vida dedicada al PSOE, ha visto la luz como San Pablo y se ha travestido en nacionalista. A la vejez viruelas. Dado el componente genético del Alzheimer, sería muy fácil hacer un chiste al respecto, pero no es el estilo de este blog. Pero estábamos hablando de la importancia del físico y de la imagen. No cabe duda de que esta foto representa mejor que ninguna el signo político de la formación que ha acogido a este señor. Una formación que ve claro el futuro, porque está escuchando lo que dice la ciudadanía. Y con un carácter innovador, progresista, juvenil. No me dirán que exagero. Por no salirnos del sector político, vamos con otra imagen.
En este caso, el del gran tapado del prusés, además de las características compartidas con la imagen anterior (lozanía, frescura, sensación de ver claro), yo destacaría lo bien que se aprecia que este señor es catalán y no podría ser, por ejemplo extremeño o andaluz, pueblos a los que Torra considera de bestias carroñeras e incultas. Se aprecia aquí la superioridad fisiognómica del catalán, por delante de los demás pueblos ibéricos a los que los demás mortales tenemos la desgracia de pertenecer. Nos empecinamos en negar que son diferentes y, como vemos en la foto, es un empeño estéril frente a lo obvio. Voy a terminar esta serie con una foto de un señor que comparte costado ideológico con los anteriores. Esta es una imagen que excluye todo comentario, se explica por sí misma.
Sin salirnos del tema, el relevo
en la alcaldía se produjo de forma educada y cordial. La señora Carmena mantuvo el señorío, la cortesía y la corrección como en todo su mandato y esta imagen, instantes
después de hacerle entrega a su sucesor del bastón de mando, es prueba
fehaciente.
Hace unos cuantos posts les
prometí que, si hacía falta, proclamaría que el nuevo Alcalde es idéntico a
Brad Pitt. En fin, les reto a que en mi serie de posts al respecto encuentren
algún comentario en que me meta con el PP. Con quien me he metido y a fondo es
con Ciudadanos, porque sigo sin entender su deriva en estos últimos tiempos,
excepto por la antipatía personal constatada entre Rivera y Sánchez. Saben que
me congratulé sucesivamente de que el PP quedara por delante de este grupo de
arribistas en TODAS las elecciones importantes que se han celebrado en estos
dos meses. Y de Almeida, excluyendo el físico, no se han escrito en este blog
más que comentarios positivos. Pero, si este señor tiene el físico que tiene,
yo he de reseñarlo aquí. También he de decir que no es el Alcalde más feo de la
historia reciente de la ciudad, título del que sería imposible desbancar a Juan Barranco. Pero vean esta otra imagen, recién nombrado,
charlando amigablemente con los policías municipales. Es obvia la
condescendencia y la coña, no exenta de respeto, con que atienden estos agentes
del orden a su nuevo jefe. Más o menos la misma que mostraban ante el pequeño Niocolás.
Viendo estas imágenes no puedo
evitar que me venga a la mente el ratoncito Ratatouille, un personaje, por lo
demás, entrañable. Sus decisiones por ahora, están siendo las previsibles.
Desbloquear operaciones urbanísticas que Ahora Madrid tenía paralizadas,
eliminar ayudas a entidades que promovían actividades festivas de barrio,
recuperar fiestas y eventos castizos como el desfile de la policía municipal
por el Retiro. Estas decisiones dan fe del cambio ideológico del equipo
director, pero no son especialmente dañinas para la ciudad. Dentro de poco
veremos mejoradas las procesiones, las romerías del Santo. Y supongo que las
plazas principales de la ciudad serán liberadas de manteros a hostia limpia.
Sin embargo, dudo que supriman el Madrid Central. Sería una decisión que les
traería más contrapartidas negativas que beneficios. Veremos.
Pero yo había titulado este post Triglicéridos, ya se imaginan por qué, y
resulta que ya me he comido todo el espacio útil de escritura, así que vamos a
dejar el tema para el texto siguiente. Sólo un comentario: lo peor son los
triglicéridos mentales y anímicos y, de estos, ando yo bastante cargado últimamente. Así que cerraré
con otra imagen. Esta vez es de la señora Monasterio, promujer, que no prohombre, del grupo Vox, arquitecta y madre de
familia numerosa. El día de su toma de posesión como parlamentaria, exhibía
esta sonrisa universal, como si estuviera pensando: –Si he dicho en mis mítines
que en las guarderías de la Comunidad de Madrid se promovía la zoofilia y el
fetichismo pinrelero, y aún así me han votado mayoritariamente, entonces ya
puedo decir lo que quiera, que a mis seguidores les va a dar igual. Que tengan un buen finde, a pesar del calor.
He visto una foto de nuestra querida Coruña y en ella se observa que ya están puestas la vallas blanquiazules de protección de la fuente (luminosa) de Cuatro Caminos. Mal augurio. Preñados estamos de celebraciones funestas. A ver si nos va a pasar como a los ingleses en 1741 cuando acuñaron monedas conmemorando la victoria en Cartagena de Indias no contando que estaba defendida por nuestro "vascuence" Blas de Lezo que les dió una paliza que aún hoy se recuerda. Ni que decir tiene que este episodio no figura en los libros de historia ingleses...
ResponderEliminarEn fin, espero que San Benitiño de Lérez nos eche una mano y salgamos bien de la batalla isleña. Las hogueras de San Xoán nos esperan.
Un abrazo querido brother.
Confiemos, querido amigo. En estos últimos partidos han jugado muy bien. Necesitamos un pelín de suerte y ya está.
EliminarYo estoy en ascuas.
Jo... que teima tenéis con San Benitiño de Lérez si todo el mundo, es decir el Ribeiro entero y alrededores, sabe que el auténticamente más milagreiro es el do Rabiño que está muy cerca de Cortegada. Así que por el bien del Deportivo no descartes esta advocación querido Emilio.
ResponderEliminarLos dos son muy milagreiros pero en esto del fútbol creo que como la virgen de la Almudena y San Isidro no hay nadie y si no pregúntenle a Florentino como se pueden ganar trece champions...
EliminarQuerido amigo, después de tus repetidas advertencias en el mismo sentido, formalmente sumo a San Benitiño do Rabiño a mis advocaciones y jaculatorias. Y, si logramos un buen resultado, prometo darle la exclusiva.
ResponderEliminarUn abrazo.
Esta era una respuesta a Paco Couto, pero se ha publicado como comentario nuevo.
EliminarEsta es la jornada previa a la noche de San Juan. Yo estoy cagadinho, cagadinho. Pero hay que confiar y mantener la serenidad.
La gente suele decir "que gane el mejor". Nada de eso. Yo grito muy alto: QUE GANE EL DEPOR, AUNQUE NO SEA EL MEJOR.
Hoy lunes, 24 de junio de 2019 d.c. 2772 urbe condita, día de San Xoán recuerdo otra vez al vascorro Blas de Leza en 1741 redivivo en mallorquín.
ResponderEliminarGAFES que son unos GAFES.
A tomar por culo el ascenso. Se cumplieron tus temores (y los míos). Nos esperan años de mierda en Segunda (al Celta le costó cinco años reconstruirse debidamente). Una fatalidad.
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