viernes, 13 de junio de 2014

260. ¡Viva el furgol!

Vaya, no es por presumir, pero…  Bueno, qué coño, la verdad es que sí es por presumir, para qué lo voy a negar. Quiero decir que, igual que reconozco que como pronosticador soy un desastre, tendrán que admitir que en ocasiones demuestro una cierta intuición para anticiparme a los acontecimientos. Por ejemplo, en el famoso asunto de los pedos del señor Draghi (posts #2 y #5), más de año y medio después, la amenaza de deflación ha sacado otra vez de su ostracismo a este esquivo caballero italiano, que se ha visto obligado a tirarse una nueva bufa, con perdón. ¿De qué otra forma calificarían ustedes su última y comentada declaración? Lo que ha venido a decir este señor es que, en caso de que fuera preciso adoptar medidas de inyección de dinero, recompra de activos tóxicos y otras similares, lo haría y no le temblaría la mano.

Estas medidas son en definitiva las quantitative easing que llevan aplicando los americanos desde que empezó la crisis (post #212), y los remedios que también han implementado (joder, qué palabro) los japoneses y los británicos. Y las que aplicaríamos nosotros si tuviéramos aun la peseta. Y las que la señora Merkel no permite en su Unión Europea, salvo caso de necesidad por estar en peligro la supervivencia del tinglado. La declaración de Draghi es poco más que una simple bufa, pero ya saben que, cuando Draghi se tira una bufa, baja la prima de riesgo. Ya les he dicho también que el hecho de que la prima se desplome y nosotros sigamos igual de jodidos, viene a demostrar que, cuando llegó a los 600 puntos, la cosa no era tan grave y peligrosa como nos dijeron; que se trataba de magnificar la amenaza para aprovechar y calzarnos unos recortes que, sin el terror previo, no hubiéramos tolerado. Todo esto de la prima de riesgo era un bluff, una simple añagaza (joder, qué palabra más hermosa) para llevarnos al huerto, más bien, erial socioeconómico en donde nos tienen ahora, cautivos y derrotados por los ejércitos del capital.

Otro tema en el que habrán de reconocer que me anticipé, es el de Ucrania. En el post #208, escrito el 3 de diciembre, explicaba yo lo que se estaba jugando en ese país del Este, aunque he de admitir que no creía entonces que las tensiones estratégicas que amenazaban con desgarrar ese inmenso y castigado territorio, fueran a estallar tan pronto y de forma tan brusca y dramática. Por último, lo que está empezando a pasar hoy en Brasil, también lo anuncié como posible en los posts #224 y #226, allá por el mes de enero. Hasta aquí me he citado a mí mismo seis veces y he estado a punto de ponerles eso de pinchar AQUÍ, pero he preferido señalar los números de post, para que quien quiera los busque en el lado derecho del Blog. No se lo voy a dar todo masticado y digerido. Cualquiera de los seis posts que les cito es de lectura interesante, siempre en mi opinión. Hala, ya no presumo más.

Quedémonos en Brasil.  La contestación contra el Mundial surgió hace tiempo en Sao Paulo y se extendió a todo el país. Al frente del gobierno, la señora Roussef (por cierto antigua guerrillera del grupo antifascista COLINA, en los sesenta), está tan acojonada que, según sus propios datos, ha desplegado a 160.000 policías y militares para garantizar la seguridad de los eventos en las doce sedes, y se ha gastado 20 millones de euros en material militar, una inversión que duplica la comprometida por Sudáfrica, con ocasión del Mundial anterior. Un esfuerzo económico y de personal que se empleará en defender a los ricachones de la FIFA de la justa ira del pueblo al que esos mismos efectivos deberían proteger. Tal vez hubiera sido más conveniente invertir la mitad en seguridad, como en Sudáfrica y, con los diez millones restantes, construir escuelas y hospitales, esas minucias que reclama la población más necesitada de un país con unas desigualdades tremendas. ¿Que es un argumento demagógico, me dicen? No, no. No lo creo. A lo mejor lo sería si dijera que no se celebrase el Mundial y se empleara todo el dinero en trabajar para la igualdad social. Yo no digo eso. Yo digo que sería más razonable invertir mitad y mitad. No soy un radical con coleta, ya saben que soy un jodido pactista moderado y encima futbolero.

Es que del futbol se aprende mucho. Por ejemplo, ya les he contado que el Depor subió finalmente a Primera, a pesar de que sólo ganó uno de los últimos siete partidos. Estaban tan asfixiados que jugaban contra cualquier panda de mataos y perdían. Pero sucedía que los equipos que lo seguían en la clasificación jugaban después y también perdían. No aprovechaban la ventaja que les concedía el equipo coruñés. Así han llegado a la meta. El Depor delante, por los pelos, y los otros detrás. El Depor está en Primera, con la puntuación más baja, históricamente, desde que se estableció el sistema de que ascendieran los dos primeros clasificados de Segunda. ¿Por qué les cuento todo esto? Pues porque veo una analogía con la situación política nacional. El PP no lo ha podido hacer peor. Ha desmontado el estado de bienestar hasta extremos impensables hace tres años. Ha recuperado la religión en los colegios y promovido una Ley del Aborto de Gallardón que nos pone a la cola de Europa. Y muchas más cosas. Aquí tienen uno de los múltiples anuncios que circulan por Internet.


Muy bien. Cualquiera pensaría que los demás partidos adelantarían fácilmente al PP en la carrera hacia las próximas elecciones (locales y autonómicas). Pero ¿qué hacen estos partidos? Pues, como los rivales del Depor, jugar después y perder por goleada. Desaprovechar la ventaja. Rajoy les estaba poniendo a huevo la victoria en las elecciones de los próximos diez años. Pero, como sigan así, mucho me temo que vuelvan a perder. El que avisa no es traidor. ¿De verdad ven ustedes al PSOE con capacidad de generar algún líder que conecte con el personal y gane alguna de las próximas elecciones? Por no hablar del gallinero del señor Cayo Lara. Podemos empieza a descomponerse y cae presa de sus propias contradicciones fundacionales: ahora sale nada menos que el Círculo de Enfermeras (que no de Lectores) a disputarle el liderazgo a Pablo Iglesias. Como no espabilemos, nos vuelve a ganar el PP en todas partes, porque además cuenta con la posibilidad del apoyo cantado de los Upeydeiros en donde les haga falta. Pero nada: nosotros encelados con la República y el referéndum, abducidos por una flauta de Hamelín no muy diferente de la que siguen los catalanes.

Ya hablaremos del rey y la sucesión en textos post-eriores, que esto iba de furgol y estoy casi acabando y apenas he hablado de furgol. Entre renglón y renglón estoy viendo el partido inaugural Brasil-Croacia, aunque bien es cierto que lo tengo sin sonido. El gran notición del día en el universo del futbol es que Cesc Fábregas se vuelve a Londres. Gran tipo este Fábregas y muy buen futbolista. No sé si conocen su historia. Nacido en un pueblo que no recuerdo, recala en el Barça de juveniles y empieza a trabajar. A los 16 años suceden dos cosas en su vida. Sus padres se separan y los ojeadores del Arsenal londinense le ofrecen un contrato. Yo no digo que las dos cosas tengan relación, juzguen ustedes por sí mismos y que cada uno piense lo que quiera. Con 16 añitos, el chaval se planta solo en Londres, sin saber una palabra de inglés. No se va, como hacen algunas figuras, con novia, padres, cuñados, etc. Pero sigue trabajando y aprendiendo.

Tras un año en los juveniles del Arsenal, el entrenador francés del club, Arsene Wenger, lo sube al primer equipo. Y se convierte, con 17, en titular y en el ídolo de la grada que, domingo tras domingo, entona unánimemente su nuevo cántico: Fabregás, Fabregás, he’s only seventeen, but he’s better than Roy Keane. Roy Keane era en ese tiempo el orgulloso líder del Manchester United, rival del Arsenal. Con 21 es ya el capitán del equipo. Va a la selección y participa decisivamente en la primera Copa de Europa y en el Mundial de Sudáfrica. En las celebraciones del Mundial en Colón, su amigo Pepe Reina, micrófono en mano, lo presenta como el empanao más empanao de todos los que conoce. Fábregas tiene de empanao sólo la mirada. A poco de llegar a Londres se echó una novia, Carla, que le duró siete años, hasta que conoció a su actual pareja, Daniella, una libanesa guapísima doce años mayor que él, por entonces casada y con dos hijos.

Y entonces empiezan a darle el coñazo desde el Barça: que se venga para casa, que él es catalán, que tiene que apoyar al equipo de su tierra (más que un club: un puticlub, como se ha visto en estos últimos años), que qué pinta él en Londres, que tiene que estar con los suyos y apoyar el proceso colectivo en el que andan todos embarcados. Le ofrecen el oro y el moro y le convencen de que se tiene que ir a Barcelona. Daniella se va con él, mientras tramita su divorcio, esperando encontrar una ciudad cosmopolita, mediterránea y acogedora, como era Barcelona hasta que la han estropeado los paletos.

Tres años después, en esta irreconocible Barcelona chata y provinciana, a Fabregas no le quieren. Un tipo tan cosmopolita como él no tiene sitio allí. Le silban en el campo y le ningunean en la calle. Y por eso se va. Vuelve a su querida Londres. El lugar donde ha sido más feliz. Daniella ha ganado su demanda de divorcio y se ha quedado con la mansión familiar. Una casa lujosa, que espera a la pareja. Y, sobre todo, una ciudad libre, abierta, sin los ruidos del nacionalismo. 

Esa es mi interpretación, como siempre sesgada y partidista. Aquí no se informa, aquí se opina. Mis textos están compuestos de dos cosas: datos (ciertos) y valoraciones sobre esos datos. Los datos pueden creérselos. Las valoraciones son mías, no tienen por qué compartirlas. Brasil ha ganado, como era de esperar, y yo me voy a dormir. Que descansen.

2 comentarios:

  1. Totalmente de acuerdo con lo de Cesc, el nazional-catetismo no tiene enmienda. Por otra parte querido amigo, tenemos la suerte de contar la liga que viene con nuestro Deportivo en primera, cosa que hace un año se me apostaba imposible, es más, hubiese jurado que nos íbamos al pozo de la 2ªB. A disfrutar.
    Un abrazo.

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    1. Lo del Depor ha sido decisivo. Si no llegamos a subir este año, al que viene las hubiéramos pasado canutas: Betis, Osasuna, Zaragoza, Mallorca, Valladolid, Sporting. Sin embargo en Primera, tendremos al Eibar, Rayo, Granada, Almería, Celta y algún otro que puede quedar por debajo de nos.
      Joder, Groucho, échale un ojo al post 253. Es el tercero de una serie sobre la aceleración y terminaba mandándote un abrazo. Es que vi el vídeo de los de Rancid, que van tan velliños como nosotros, y se me representó la imagen de la reaparición de Water de Caballeros.
      Pues eso, un abrazo fuerte.

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